Salmos para la salud

Salmos de protección ante el miedo





En la vida solemos tener experiencias muy fuertes: una relación abusiva, la pérdida de un ser querido, un accidente… Algunas lo son tanto que nos paralizan emocionalmente y no sabemos qué decir, ni qué hacer y, muchas veces, ni siquiera sabemos qué sentir. Es tan fuerte que afecta nuestra relación con Dios, y nos preguntamos: ¿dónde está Dios en todo esto?
En su libro «La mujer del viajero en el tiempo», la escritora estadounidense, Audrey Niffenegger, describe la historia de Henry quien tiene una enfermedad genética que le hace viajar en el tiempo en momentos de estrés sin que él pueda controlar cuándo o adónde va. La primera vez que pasó, él era un niño y viajó solo unos segundos en el pasado para volver a ver a su madre morir en un accidente automovilístico. Él creció con el único deseo de retornar a ese preciso momento y decirse a sí mismo: «no tengas miedo».
A veces eso es lo único que necesitamos. No necesitamos saber los detalles de todo lo que va a pasar en el futuro, solo necesitamos escuchar esas palabras de aliento: «no tengas miedo». Eso es lo que Dios nos dice a través de su Palabra, una y otra vez. Te invito a escuchar con los oídos del corazón estos versículos:
  1. Isaías 41:10
    No tengas miedo, pues yo estoy contigo;
    no temas, pues yo soy tu Dios.
    Yo te doy fuerzas, yo te ayudo,
    yo te sostengo con mi mano victoriosa.
  2. Salmo 23:4
    Aunque pase por el más oscuro de los valles,
    no temeré peligro alguno,
    porque tú, Señor, estás conmigo;
    tu vara y tu bastón me inspiran confianza.
  3. Josué 1:9
    Yo soy quien te manda que tengas valor y firmeza. No tengas miedo ni te desanimes porque yo, tu Señor y Dios, estaré contigo dondequiera que vayas.
  4. Te invito a leer la Palabra de Dios para que, a través de tu vida, sus palabras de aliento te sostengan y puedas así vivir sin temor y lleno de valentía.
    ¿Cómo has vencido, con la ayuda de Dios, tus miedos? Déjanos tu comentario


Comentarios